El código de vestimenta

La Emperatriz Interestelar tuvo una revelación, una epifanía; soñó con una oficina llena de hombres atractivos y mujeres bellas, uniformados todos, vestidos de firma y desfilando con paso decidido hacía el olimpo de las relaciones públicas…

Pues bien, para llevar a cabo está mesiánica visión –mezcla de Orwell y el Diablo viste de Prada- concibió un plan supremo: crearía un código de vestimenta. La genial iniciativa (en realidad un copia del que se aplica en las consultoras de verdad) requería de una cuidada planificación y una comunicación sutil.

El mail que envío a toda la plantilla decía algo así:
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De: La asistente de la emperatriz
Para: Todos
Asunto: Código de Vestimenta
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En este negocio no basta con ser bueno, hay que parecerlo. Así que a partir de ahora es obligatoria la siguiente vestimenta:
Hombres: Chaqueta, camisa y calcetines (esto no se por qué lo explicitan, pero bueno)
Mujeres: Estilo business
Este código es de obligado cumplimiento a partir de mañana, todos los días de la semana e independientemente de la estación en la que nos encontremos.
Firmado: Ella
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Claro, sencillo y sobre todo flexible…

El resultado, me temo, no fue del todo satisfactorio: un 40% de trajes blancos entre los hombres, 1/3 de camisas negras (que son muy fashion en Barcelona, pero aquí cantan un poco), un 15% vestidos de primera comunión y unos pocos atrevidos con el más puro estilo Enrique Iglesias, vaqueros y americana; correcto, pero fuera de lugar. Las chicas, lo normal, vaqueros, camisetas sin mangas, vestidos hippies, botas, chanclas, etc.

Nada, debió pensar, la Emperatriz otro mail y listo.
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De: La asistente de la emperatriz
Para: Todos
Asunto: Código de Vestimenta 2
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He observado ciertas interpretaciones laxas del código de vestimenta, por lo que a partir de ahora es obligatorio:
Hombre: Traje oscuro, camisa y calcetines
Mujeres: Falda o pantalón con blusa
Para todos prohibido vaqueros.
Este código sigue siendo de obligado cumplimiento a partir de mañana, todos los días de la semana e independientemente de la estación en la que nos encontremos
Firmado: Ella
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Pues nada dicho y hecho: inmensa mayoría de camisas melocotón, amarillo clarito y rosita palo, 50% de la plantilla con zapatitos con borlas, calcetines de colores varios, y un aumento preocupante de los trajes verdes y marrones (oscuro, eso sí). Por último, la aparición de uno de una de mis prendas favoritas, la rebequita verde caza que queda bien en cualquier situación… Las chicas, mejor.

Como en todo, siempre está el clásico grupo de pelotas que han seguido las instrucciones a raja tabla, y de hecho hay quién ya solo se pone corbatas a juego con el forro del traje, en fin un tío raro!

En cualquier caso, os aseguro que aún retumban los gritos de la emperatriz interestelar, en fin tercer intento.
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De: La asistente de la emperatriz
Para: Todos
Asunto: Código de Vestimenta 3
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Vamos a ver si lo dejo claro, hay que vestirse de forma elegante y el que no lo cumpla igual se está equivocando de sitio.
Hombres: Traje oscuro (gris o azul), camisas discretas, zapato mocasín y calcetines oscuros.
Mujeres: Sin cambios
Este código sigue siendo de obligado cumplimiento a partir de mañana, todos los días de la semana e independientemente de la estación en la que nos encontremos
Firmado:Ella
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Solucionado, pensará el avezado lector, pues no del todo me temo: las camisas negras han vuelto y las rebequitas verde caza aguantan el tirón, pero lo mejor está en las corbatas… han vuelto los sesenta, tono pardos, amebas por todos lados y todas las variedades posibles del marrón: claro, caqui, más caqui, mas oscuros, con más brillos…

En fin, así es la vida, lo que era un sueño de una oficina fashion se ha convertido en un remake de Cuéntame… pero ya lo dijo Carajillo: “al final, piltrafilla, el estilo es algo personal, que se tiene o no, y en esta oficina de eso hay mucho" pues si él lo dice...